EL POBLAMIENTO HUMANO. LAS CIUDADES.
1. Concepto de
ciudad.
La intervención humana sobre el
territorio ha transformado los espacios naturales en espacios humanizados. Aquellas
zonas donde existe una alta densidad de población son las más transformadas,
donde el paisaje refleja la actividad humana con más intensidad. Estos lugares son las ciudades, en las que los
componentes bióticos del paisaje han sido sustituidos por elementos antrópicos.
El criterio de la morfología del
paisaje urbano es uno de los que se ha utilizado para definir que es una ciudad,
es decir, para distinguir aquello que es una ciudad de aquello que no alcanza
dicho rango. La apariencia externa, la forma, la estructura de una ciudad es
diferente a la de otros núcleos de población: edificios altos, calles grandes y
anchas que facilitan un tráfico intenso, etc.
Otros de los criterios que se
utilizan habitualmente para definir las ciudades es el de su tamaño, así
cada país fija un volumen de población mínimo para considerar a un núcleo de
población como ciudad. España lo tiene
fijado en 10000 habitantes, Japón en 30000, mientras que en algunos países
escandinavos los tienen fijados en 200 habitantes. Es por lo tanto un criterio
variable al existir tal disparidad de umbrales de población en el mundo.
Shanghái (R.P. China) |
El tercer criterio utilizado para
diferenciar el espacio urbano del espacio rural es la actividad económica que
desarrollen sus habitantes. Así, mientras en el espacio rural dominan las
actividades relacionadas con el sector primario, en el mundo urbano los trabajos principales son los vinculados a los
sectores industriales y de servicios. Así sería difícilmente clasificables
como ciudad algunas aglomeraciones humanas (por ejemplo en algunos países
asiáticos) en la que sus habitantes trabajan principalmente en el sector
primario, mientras en otros lugares (como los mencionados núcleos urbanos de
los países escandinavos) a pesar de no alcanzar un elevado número de habitantes,
podrían ser clasificados como ciudades debido a su actividad laboral.
Otros criterios utilizados hacen referencias a aspectos sociológicos, como
la composición y desigualdad de la sociedad, siendo más homogénea en las zonas
rurales que en las urbanas; las relaciones interpersonales, más estrechas en el
mundo rural y más distantes en el urbano; etc.
No existe por lo tanto una definición unánime del concepto de ciudad, si bien la más acertada podría ser aquella que uniera los principales criterios descritos anteriormente: Aglomeración de población que ha transformado un espacio natural preexistente en un espacio altamente humanizado de características físicas y sociológicas fácilmente diferenciables del medio rural en cuanto a su morfología, composición y comportamiento social, y actividades económicas que en ella se desarrollan.
No existe por lo tanto una definición unánime del concepto de ciudad, si bien la más acertada podría ser aquella que uniera los principales criterios descritos anteriormente: Aglomeración de población que ha transformado un espacio natural preexistente en un espacio altamente humanizado de características físicas y sociológicas fácilmente diferenciables del medio rural en cuanto a su morfología, composición y comportamiento social, y actividades económicas que en ella se desarrollan.
2. Funciones.
La función de la ciudad es la actividad principal que se realiza en ella y que sirve para relacionarla con el territorio circundante. Son las personas que viven en ellas, las que con sus diferentes empleos definen la función general de la ciudad. Estas funciones son las que justifican la existencia de una ciudad en dicho emplazamiento y situación. Tradicionalmente se han venido distinguiendo las siguientes funciones urbanas, que justifican la existencia de las principales ciudades del mundo, aunque con el paso del tiempo han ido evolucionando:
a. Función militar: aunque actualmente
esta función ha decaído, si se puede explicar el origen de muchas ciudades
debido a un emplazamiento en lugares estratégicos para la defensa, como en lo
alto de una colina, o junto a los pasos fácilmente vadeables de los ríos. Hoy
en día esta función militar principal, se puede observar en las localidades
próximas a bases militares, en las que mucha población trabaja dando servicios
a las instalaciones del ejército.
b. Función comercial: La importancia
de ferias y mercados en tiempos medievales y modernos, favoreció el surgimiento
de ciudades en lugares bien comunicados, como cruces de caminos o puertos de
mar. Actualmente las ciudades son el centro comercial de un amplio territorio
que se abastecen de ellas. Es por tanto que en las ciudades se concentran las
principales empresas comerciales, y todas aquellas que surgen entorno a ellas
(seguros, bancos, transportes, etc.).
Calle Corrida -calle comercial-, Gijón. |
c. Función industrial: aunque las
industrias no tienen por qué estar localizadas en el medio urbano, debido a la
necesidad de mano de obra y a la concentración de clientes y otras empresas de
servicios necesarias para la producción en las ciudades, muchas industrias
buscan también esta localización. Esta función se ha visto reforzada desde la
revolución industrial, en la que la expansión de la industria favoreció el
crecimiento urbano.
Can Batlló, Barcelona. |
d. Función cultural: la
concentración de actividades culturales y sociales explican la supervivencia de
ciudades en entornos económicos hostiles. El turismo cultural ha permitido el
crecimiento de ciudades como Venecia o Toledo, en la que muchas de las
actividades económicas que en ellas se desarrollan están relacionadas con las
visitas turísticas, congresos, festivales, etc. Otras ciudades viven gracias a
la afluencia de peregrinos a sus santuarios o iglesias, Roma, Santiago de
Compostela, Lourdes, La Meca, etc. La existencia de universidades u otras
instituciones educativas, también favoreció el crecimiento de las ciudades
donde se localizaban, debido a la atracción durante gran parte del año de una
gran cantidad de población flotante (estudiantes), por ejemplo Oxford o
Salamanca.
Centro Cultural Niemeyer, Avilés (Asturias). |
e. Función de acogida: aquellos
lugares cuya principal actividad es ofrecer alojamiento y diversión a los
turistas y otros visitantes. Los lugares de recreo veraniego e invernal son los
que conforman este tipo de ciudades, ejemplos de las cuales son ciudades como
Marbella, Benidorm o Montecarlo.
Benidorm (Alicante). |
f. Función política y de administrativa: la designación
de la capitalidad de un territorio para una ciudad le supone la instalación en
ella de múltiples organismos públicos, y la necesidad de muchos funcionarios
que los atiendan. Esta función ha permitido el crecimiento de las capitales
estatales y regionales, ya que habitualmente, junto al poder político se suele
instalar el poder económico.
3. Jerarquías y
redes urbanas.
Las ciudades
ejercen una fuerte influencia sobre las zonas que se encuentran en su entorno
más o menos próximo, son las llamadas
áreas de influencia. Según sea el tamaño de estas áreas, se puede
establecer una jerarquía urbana.
A. Ciudades con área de influencia global. Son las grandes metrópolis del mundo como Nueva York, Tokio, Londres, etc., dónde se toman decisiones políticas y económicas que afectan a todo el planeta.
B. Ciudades con área de influencia nacional. Se trata de las grandes ciudades de cada país donde se toman las decisiones que afectan a toda la nación. Por lo general son las capitales de los estados y los grandes centros económicos, como Madrid, Barcelona, Roma, París, Buenos Aires, Chicago, etc.
C. Ciudades con área de influencia regional. Son aquella que establecen relaciones de influencia con los territorios más cercanos, como Gijón, Oviedo, Bilbao, Sevilla, Valencia, La Coruña, etc.
D. Ciudades con área de influencia local. Su área de influencia se limita a su entorno inmediato, como Avilés, Mieres, Sabadell, Torrelavega etc.
E. Ciudades con área de influencia rural. Son ciudades pequeñas que establecen relaciones con sus entornos rurales más próximos, cuyos habitantes han de acudir a ellas para obtener servicios especializados, como Langreo, Mieres, Viveiro, Plasencia, Béjar, etc.
Los núcleos
jerarquizados que conviven en un territorio y que mantienen relaciones entre
ellos configuran una red urbana. En los países desarrollados, las redes urbanas
son densas, ya que las relaciones entre las diversas ciudades son muy estrechas
e inclusos independientes. Sin embargo, en los países subdesarrollados la red
urbano es menos estable, porque no es tan densa y la jerarquización resulta
menos evidente.
4. Forma y
estructura de la ciudad.
La morfología
es la forma externa de las ciudades. Esta se ve influenciada por el
emplazamiento (relación con el medio físico: sobre una colina, en la ribera de
un río, etc.) y la situación (posición relativa de la ciudad con respecto al
entorno próximo: otras ciudades, vías de comunicación, etc.). Su estudio se
realiza sobre un plano, que es la representación a escala de los espacios
construidos (edificios) y de la trama urbana (calles, parques, y otros espacios
vacíos).
La forma sobre
el plano de la ciudad puede ser de diferentes maneras dependiendo de la trama
viaria:
Barcelona (El Ensanche), ejemplo de ciudad ortogonal. |
B. Radiocéntrico: cuando desde el centro de la ciudad parten múltiples calles en todas
direcciones a modo de radios, mientras que otras circulares las cortan y rodean
por completo al centro urbano (ejemplo de ello es Budapest).
Palmanova (Italia), ejemplo de ciudad radiocéntrica. |
C. Irregulares, que contiene calles estrechas y sinuosas, muchas de ellas sin salida,
originadas por la inexistencia de planificación previa a la construcción; las
manzanas de viviendas eran por tanto irregulares y compuestas por edificios
altos en los que se hacinaba la población. Las ciudades de origen medieval
suelen tener este tipo de configuración.
Gijón (Asturias), el casco histórico de Cimadevilla como ejemplo de ciudad irregular. |
D. Lineal, corresponde a núcleos de población que surgen y
se extienden a lo largo de un río o una vía de comunicación.
La estructura
urbana también está condicionada por las funciones a las que se destina el
suelo urbano. De esta manera, se diferencian el área central (suele
corresponder al centro histórico), áreas de residencia (zonas de habitación de
la población), áreas comerciales y de
negocio, áreas industriales, zonas verdes, áreas específicas o especializadas,
etc.
Sama, Lagreo (Asturias), ejemplo de ciudad lineal. |
5. La ciudad
preindustrial.
La
revolución neolítica, durante la que se desarrolló la agricultura y la
ganadería, produjo la sedentarización de la población y el surgimiento de
actividades económicas no directamente relacionadas con ambos sectores, como la
artesanía y el comercio, además de otras actividades no productivas necesarias
para el funcionamiento social, como la defensa encomendada a los soldados, los
sacerdotes, encargados del culto a los dioses y que en muchas ocasiones también
eran los encargados de dirigir las relaciones sociales, etc.
Çatal Hüyk (Turquía). Primeras ciudades neolítcas 8000-6000 a.C. |
Aparecieron
en el Oriente Próximo los primeros núcleos urbanos que marcarían la historia
antigua de la humanidad. Desde entonces hasta nuestros días la población urbana
ha ido en aumento. Fueron los fenicios, griegos y cartagineses quienes difundieron
la ciudad por el Mediterráneo, fundando colonias con finalidades mercantiles a
lo largo y ancho del mar.
Recreación idealizada de Babilonia (Mesopotamia), VII a.C. |
El
Mediterráneo, convertido en Mare Nostrum por los romanos, siguió siendo el eje
de la urbanización en los primeros años de nuestra Era con la expansión de este
pueblo. A partir de entonces las fundaciones de ciudades contaban con un plan
previo, en cuadrícula, a semejanza del campamento militar romano, basado en dos
calles principales (cardus y decumanus) que se cruzaban en el centro de la
ciudad, donde se situaba el foro o plaza pública en torno a la que se
localizaban los principales edificios de la ciudad. El urbanismo romano se
completaba con la acometida de alcantarillados, pavimentado y traída de aguas
hasta la ciudad a través de canales y acueductos. Además, constituyeron una
primera red de ciudades jerarquizadas y unidas mediante las calzadas.
Durante
la Edad Media la sociedad se ruraliza, disminuyendo la importancia de las
ciudades. Estas se vuelven irregulares siguiendo dos modelos principales, el
islámico y el cristiano. El modelo islámico se caracteriza por su desarrollo
entorno a un barrio central, junto a la mezquita mayor, normalmente cercado por
murallas de adobe y defendido mediante torres albarranas; en el exterior del
barrio amurallado se localizan numerosas viviendas que constituyen los
arrabales, en los que se localizan igualmente algunas industrias textiles. Otro
lugar importante en torno al que se organiza la ciudad árabe es el zoco o
mercado.
Toledo (Castilla-La Mancha). |
La
ciudad cristiana se desarrolla alrededor del castillo, catedral, mercado, etc.
que forma el centro del núcleo urbano, en torno al cual se suelen distribuir
las calles de manera radiocéntrica. Existen otros modelos de ciudad medieval
cristiana lineal, junto a las principales vías de comunicación o peregrinaje.
Durante
el renacimiento, barroco y neoclasicismo se suceden nuevos modelos urbanísticos
que reordenan las ciudades. Supone la vuelta a la planificación urbanística y
la intervención en los centros históricos, para la construcción de plazas y
otras vías públicas. La ornamentación de las ciudades constituye una
preocupación general en estos periodos. Es el momento en el que se inician las
grandes reformas urbanas en los centros históricos (Grandes Vías, Plazas
Mayores, etc...).
Ciudad del Vaticano. |
6. La ciudad
industrial.
La
industrialización de las ciudades a partir de finales del siglo XVIII, supuso
la llegada masiva de nueva población procedente del medio rural y por lo tanto
el aumento de la misma y las necesidades de viviendas. Surgen barrios obreros
junto a las zonas fabriles. Ante estas nuevas demandas se realizan propuestas
urbanísticas algunas de ellas irrealizables, como las ideadas por los
socialistas utópicos (Fourier, Owen y Richardson) otras más prácticas, como la
ciudad jardín de Howard. El crecimiento de estas ciudades se realizó de una
manera planificada en los denominados ensanches, zonas de ampliación urbana
realizada mediante plano ortogonal.
Los
avatares históricos del siglo XX, han condicionado el urbanismo en los países
europeos, así tras las guerras mundiales, en la que se vieron implicados la
mayoría de ellos, se hubo de reconstruir rápidamente las ciudades. Las
necesidades de vivienda aumentaron debido al aumento del éxodo rural. Por otra
parte las ciudades comenzaron a transformar su principal función hasta este
momento, la industrial, y comenzaron a ser centro de las actividades
terciarias. Diferentes fueron las soluciones que aplicaron los distintos
países, aunque similares los resultados. En las zonas donde surgieron repúblicas
socialistas, el modelo constructivo a seguir se basaba en grandes bloques de
edificios prefabricados a base de elementos de hormigón construidos en serie,
que se acoplaban a modo de puzle formando barrios enteros de grandes edificios
iguales (Paneles). Su construcción era rápida, e iba acompañada de la
correspondiente dotación social (colegios, tiendas, etc...) en edificios bajos
de marcada horizontalidad y gran contraste con las viviendas verticales, todo
ello rodeado de jardines, pistas deportivas y bien comunicados con el resto de
la ciudad. En la Europa del oeste, surgieron los denominados polígonos de
viviendas, de diferente calidad según la época (de materiales peores cuanto más
próximos a la guerra). Eran barrios de edificios medianos e independientes,
separados por jardines, plazas, etc. Pero la especulación del suelo y el
aumento del precio de la vivienda favorecieron la desaparición de espacios
vacíos, y la densificación de la ciudad.
7. La ciudad
actual.
En las últimas décadas las grandes ciudades se han saturado, y la población ha comenzado a buscar viviendas, no en la propia ciudad donde trabaja, sino en sus alrededores. Los accesos a las ciudades han mejorado bastante, son rápidos, y por otra parte en el centro de la ciudad el precio de la vivienda es bastante más caro, por lo que las ciudades más grandes han perdido población en favor de los núcleos urbanos próximos (ciudades dormitorios). Este proceso se denomina urbanización difusa.
Brasilia (Brasil). |
No todas las ciudades de los países desarrollados son iguales, cada una
presenta unas características propias e únicas, pero aun así, se pueden observar
algunos rasgos comunes.
Ciudades
europeas:
Su origen suele ser muy antiguo, pudiéndose remontar en muchos casos a la época
del Imperio romano o de la Edad Media. Su trazado urbano es el resultado de su
larga historia, en el que las que se han ido superponiendo y rediseñando buena
parte de sus estructuras, construcciones y vías. Por lo general, se pueden
distinguir en su morfología las siguientes zonas:
A. Un casco
antiguo, centro histórico o zona vieja de la ciudad. Suele ser el lugar donde se originó la ciudad. En él se encuentran los
edificios más antiguos y emblemáticos, como son el ayuntamiento, la catedral o
edificio religioso notable, la plaza mayor, los grandes edificios civiles y
militares, las viviendas notables, etc. Actualmente en esta zona se desarrollan
actividades relacionadas con la administración pública, el turismo, la cultura,
el ocio y el comercio. En el caso de Gijón, corresponde al actual barrio de
Cimadevilla.
B. Ensanches. Se desarrollan alrededor del casco antiguo y se construyeron, en la mayoría
de los casos, en el siglo XIX e inicios del XX para acoger a la numerosa
población que abandonaba la zona rural para instalarse en la ciudad (éxodo
rural). Su trazado suele ser muy regular y planificado. Para su construcción,
se derribaron estructuras que en ese momento tenían poco uso o valor, como son
el caso de las murallas. En estos barrios era el lugar de asentamiento de la
pequeña burguesía acomodada. En la actualidad se desarrollan actividades del
sector servicios, básicamente de carácter empresarial y comercial. En el caso
de Gijón, el barrio de La Arena, son buenos ejemplos.
C. Periferia. Situados en el extrarradio de la ciudad y alejados del centro urbano. Suele
ser el lugar donde se vive la mayoría de la población. Dentro de esta zona
existen distintos tipos asentamientos, así podemos encontrar, barrios
residenciales (para las clases más pudientes y acomodadas), los barrios o
ciudades dormitorio (para trabajadores y clases menos favorecidas), poblados
(construidos, por lo general, entorno a una industria o actividad concreta),
etc. En la periferia, además, suele encontrarse los polígonos industriales, los
grandes centros comerciales, los hospitales, etc. En el caso de Gijón, Somió
sería el ejemplo de barrio residencial; La Calzada o El Llano el de barrios
dormitorio; La Camocha, Arnau-Portuarios o Monteana, el poblado típico ligado a una actividad económica
o industrial concreta; el Polígono industrial de La Peñona o el de Bankunion
son ejemplos de polígonos industriales periféricos, etc. En la periferia se
encuentra el hospital más grande de la ciudad: Hospital de Cabueñes.
Ciudades de América del norte y Australia:
Levantadas por
los colonos europeos a partir del siglo XVI, por lo que sus trazados son
regulares y cuentan con amplias calles, avenidas y plazas, siguiendo el modelo
de la ciudad renacentista. Diferenciamos las siguientes zonas:
A. Núcleo central
o Distrito financiero (CDB). Actualmente
convertido en el centro financiero de la ciudad. Se han construido numerosos
edificios altos y rascacielos donde trabaja un buen número de personas
(oficinas y comercio especializado). Las redes de transporte más importantes
suelen converger hacia esta zona. El valor del suelo en este lugar suele
alcanzar precios elevadísimos.
B. Áreas
residenciales. Alejadas del centro y en el extrarradio son el lugar
donde se asienta la mayoría de la población. Están formadas, en la mayoría de
los casos, por urbanizaciones de casas unifamiliares con pequeño jardín.
C. Barrios
marginales. Rodean al núcleo central y cada puede presentar características
propias. En estos barrios suele concentrarse algunas minorías étnicas.
En las ciudades
de los países desarrollados en transporte privado suele tener más importancia
que el público, por lo que a su alrededor se extiende un importante entramado
de carreteras, autovías y autopistas que comunican las distintas zonas de la
ciudad.
9. La ciudad en
los países en vías de desarrollo.
Las ciudades en los países en vías de desarrollo han crecido de un modo más
tardío, masivo y descontrolado. Las causas fundamentales de este crecimiento
son dos:
A. Búsqueda de
refugio. Desde mediados del siglo pasado, un gran número de
personas en distintos lugares del planeta se han establecido en las ciudades
como una forma de huir del hambre, los conflictos bélicos, las catástrofes
naturales o las enfermedades, entre otras causas. De esta manera, ciudades de
Centroamérica, Asia o África han visto multiplicar de manera exponencial su
población. Son los casos de México D.F., Nairobi, El Cairo, Calcuta, Delhi, Shanghái,
Rio de Janeiro, etc.
B. Instalación de
empresas y grandes fábricas. En algunos países
de Asia, América Central y Sudamérica grandes empresas multinacionales se han
instalado junto a las ciudades buscando mano de obra barata y especializada. Esto
a su vez, ha provocado un incremento descontrolado de la población. Un buen
ejemplo es Ciudad Juárez o Tijuana en México, situada junto a la frontera de
EE.UU., es el lugar donde se asientan un buen número de industrias o maquiladoras.
Las ciudades de
los países emergentes han tenido y tienen problemas para absorber toda la
población que les llega y eso les acarrea un buen número de problemas de difícil
y costosa solución y dónde se reflejan profundas diferencias sociales entre sus
habitantes (una minoría que acumula la mayoría de la riqueza y una inmensa masa social empobrecida
o carente de recursos básicos). Se pueden diferenciar las siguientes zonas:
A. Centro. Suelen seguir el modelo de las ciudades de países desarrollados, así se pueden
observar grandes rascacielos, avenidas, plazas extensas, parques y zonas
verdes, etc. En este lugar se encuentran los focos financieros y económicos,
como las grandes oficinas de las empresas, bancos, edificios administrativos,
etc.
B. Extrarradio. Formado por grandes barriadas de construcciones precarias, en la mayoría
de los casos carentes de servicios básicos (agua corriente y potable, electricidad,
saneamiento, etc.). En muchos casos las viviendas son chabolas (favelas) o
construcciones levantadas de manera ilegal, donde vive la mayoría de la gente.
C. Áreas
residenciales. En estas zonas viven la minoría social enriquecida. Son
los barrios que cuentan con todos los servicios: transporte, asistencia
sanitaria, educación, seguridad, etc.
10. Los problemas
de las ciudades.
Las
ciudades ofrecen importantes ventajas a sus pobladores, pero también se
enfrentan a diversos tipos de problemas o inconvenientes:
- Problemas de abastecimiento y equipamiento. La concentración de personas en un mismo espacio exige un elevado número de inversiones financiares para abastecer a las ciudades de agua, energía, alimentos, transporte, servicios (educativos, asistenciales, sanitarios, seguridad, administrativos), etc. Todas las ciudades deben hacer frente a elevados gastos para su mantenimiento.
- Problemas medioambientales. En los países desarrollados, la contaminación atmosférica es muy alta, fundamentalmente por las actividades industriales, las calefacciones y el tráfico urbano intenso. Las ciudades generan una ingente cantidad de residuos y basuras que son foco de contaminación del agua, el suelo y el aire, lo que conlleva una costosa gestión y tratamiento para su eliminación. El consumo desenfrenado también produce un exceso de explotación de recursos naturales.
Monumental atasco de tráfico a la entrada de una ciudad. |
- Problemas de vivienda. La elevada demanda de casas provoca unos precios muy elevados que exigen de gran parte de la población efectuar importantes esfuerzos económicos, que no siempre son asumibles. En los países subdesarrollados y en algunas zonas de grandes ciudades se originan grandes barrios de infraviviendas, marginales o chabolas.
- Problemas sociales. El modo de vida urbano provoca estrés y aislamiento. Las diferencias económicas, culturales o étnicas provocan violencia, marginalidad y delincuencia.
- Problemas de transporte. La popularización de los transportes individuales origina numerosos atascos y dificultades de aparcamiento. Sólo el fomento del trasporte colectivo, público y peatonalización de calles puede aliviar esta situación.